Con los ojos anegados asumes la realidad.
Te enfrentas al destino con pasos decididos.
Yo también querría que fuera diferente.
No te preocupes mi cielo.
Estoy sólo a unos pasos, pensando siempre en ti.
Tic tac...¿Ves? Ya queda un poquito menos.
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Madre e hija - Gustavo Schlotteman |